Menos estrés en el amor

Lidia esta sentada frente a la ventana que da a la calle en una cafetería, esta intentando leer una novela romántica, cuando a su cabeza llegan recuerdos de su ex-pareja, llegan momentos cálidos que vivió con él, besos, abrazos, caricias mutuas, pero poco a poco se va envenenando ese recuerdo por la forma en que terminaron, al final fue una decepción total y termina con un sabor amargo e intenso en su corazón, mas por el recuerdo que por la bebida de chocolate.

Se muerde los labios, suspira un poco, pasa saliva, sus ojos se entrecierran, su cuerpo se pone un poco rígido, es como si de pensarlo en exceso, se solucionara todo, es decir, como si él entrara a la cafetería, arrancara de su corazón toda experiencia previa y la tomara en brazos con la promesa de que todo será distinto esta vez.

Si tuviera una taza gratis de café por cada vez que se hace daño pensando así, seria dueña de la cafetería. no puede creerlo han sido mas las veces que ha comprado una taza de café que los momentos que pasaron juntos, en realidad, todo parece mucho mas importante cuando duele mucho en el corazón.

Hasta que llego el día que tuvo un día tan tranquilo, tan pausado, que primero tuvo que darse cuenta que le estaba regalando espacio a una relación inexistente, el solo hecho de pensarlo, era su culpa.
Ahora cada vez que llegaba un pensamiento obsesivo de amor y duda. Se detenía respiraba profundo.
Mientras decía en voz alta, este pensamiento me causa estrés, ansiedad y depresión, por lo que no debe de estar en mi mente........

A lo que invito a este articulo es a reconocer con que cuestiones cargamos y lo hemos permitido por mucho tiempo, es cierto que un recuerdo no hace daño, pero si te hace daño no debe de permitirse, es decir, en lugar de abrazar ese pensamiento totalmente imposible, ayudemos a nuestra mente a sentirse mejor.

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